TERRITORIO DE
LOS PIPILES
Los pipiles encabezaron varios cacicazgos en el territorio, como
Ahuachapán, Apaneca, Apastepeque, Cuzcatlán, Guacotecti, Ixtepetl, Izalco y
Tehuacán. De ellos, el de Cuzcatlán fue el que logró imponer su hegemonía, al
unificar el territorio pipil para crear el Señorío de Cuzcatlán, que estaba
organizado como una federación. De esta forma, sobrevivieron los cacicazgos
sometidos, como estados o departamentos que eran dependientes del cacique de
Cuzcatlán.
Durante cinco
siglos, Cuzcatlán o Cuzcatlin reafirmó su categoría de gran ciudad y fue el
centro motor de la civilización pipil